En la mañana vi las fotografías en el perfil de un amigo.
Eran del año pasado, de tu cumpleaños.
El cumpleaños que te organicé y que te arruiné la sorpresa al último por que me cuesta trabajo mentir.
¿Te acuerdas?
Mi sonrisa de oreja a oreja, me veía bien y me veía aún mejor contigo.
Hasta brillaba.
Qué bien nos veíamos, qué buenos eramos.
Creo que todos nos querían.
Hacíamos excelente pareja.
O eso creo.
Nada cambia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Mátame lentamente