Y estoy bien.
Demasiado bien.
En serio, qué puta hueva enferma, tener que andar reciclando los clichés.
Qué hueva tú.
Qué hueva ustedes.
Ay, pero si de algo me alegro, es no tener novio y tener que andarle lloriqueando a mis ex novios.
No señor, no jamás, qué horror y qué asco.
Ni al más querido se me ha ocurrido querer rogarle.
HUEVA.
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Mátame lentamente